Muchas de las obras abstractas son producto de la imaginación de los pintores o de sus pensamientos más profundo, sin retratar la realidad de una forma exacta. Por eso, cuando los vemos por primera vez estamos confusos. Cada persona puede interpretar el cuadro de una forma, pudiendo ser opuesta a la finalidad del cuadro para el pintor. Si un pintor adulto puede reflejar y crear obras de arte aunque no entendamos lo que significa a primera vista, si no somos expertos,....¿Puede crear un niño arte basado en sus pensamientos o sentimientos?
Mi respuesta es sí. Aunque no sea de forma general, siempre hay excepciones, siempre hay genios.
Aelita Andre es la pintora de los cuadros que se muestran en la parte superior. Lo bonito de este post, empieza aquí. Las obras que tenéis ante vosotros están realizadas por una niña de siete años. Dejando a un lado la teoría de que un niño no hace arte conscientemente, os mostraré la facilidad que tiene esta niña de crear alucinantes obras. Algunas se han expuesto en museos de diversas ciudades, como Nueva York o Tokio.
La pequeña artista australiana es la joya de la familia, presumen de ella desde la primera vez que la vieron pintar a los nueve meses de edad, como todos los niños. Y a la vez, de forma especial. Su primera exposición fue a los dos años, mientras que su primera venta fue a los cinco.
Ella crea cuadros salpicando la pintura sobre el lienzo, de esta manera consigue una fusión de colores muy atractiva. Utiliza pintura acrílica y para darle el toque final, lo que más le gusta es completar sus cuadros añadiendo objetos de animales, como pingüinos, mariposas, dinosaurios...
Algunos críticos han afirmado que ''Las obras de Aelita comunican un sentido de emoción y permiten un acceso único en la mente creativa de un niño''
La imaginación tiene sobre nosotros mucho más imperio que la realidad- Jean de la Fontaine
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